lunes, 23 de marzo de 2015

Incluyo que estas personas tan majas, tan saludables, tan humanas, por descontado odian a todo tipo de maricones, invertidas y demás engendros.

Por fin, mientras padezco una terrible vergüenza ajena soy preguntado por ella, la madre. Ella es la mamá que todo lo quiere controlar y que tiene perlas del tipo:
- “Hombre, los hijos de mis hijas si sé que son mis nietos… Pero cuando mis hijos tengan un bebé tampoco sabré muy bien si es suyo”.
Con mi hermana delante, of course.
Me pregunta:
Ella: Con voz de mala malísima - “Bueno… y tú ¿A qué te dedicas?”
Yo: - “Pues estudio bellas artes”
Ella: - “Ah… Qué bohemio ¿No?”
Yo: - “Supongo… jeje”
Y el silencio.
Lo llevaba claro, por todos es sabido que las personas con tendencias maniacas católicas odian todo lo que huela a cultura y arte, así que tras observar su mueca de repulsa y su cara de “pedazo maricón artista de mierda” saqué mi móvil y me abstraje.
Pues antes de la cena, “Él” (el marido de “Ella”) mandó un mail a comunicóloga. Es un hombre que no controla demasiado los ordenadores y como nuevo adicto a la red se dedica a reenviar forwards.
El forward iba acompañado de la frase “espero que te guste este PowerPoint sobre el jefe de la nación”. Al abrirlo mi pobre hermana se encuentra con el pedazo de mierda más odioso que algún puto miembro de la FAES se había dedicado a hacer en el tiempo que le quedaba libre entre la misa y la confirmación de su hija mayor de los trece que dios le ha dado.
La versión apta para nuestras edades es que más o menos decía que su familia era políticamente incorrecta porque no incluía árabes, nacionalistas, maricones ni artistas, para su desgracia eran católicos y encima practicantes y que como este tipo de familias estaba en peligro de extinción les hiciera una plataforma para protegerlos como “familia ibérica”.
Claro, comunicóloga se quedó a cuadros y su frase ante mí lo dijo todo:
- “Pero si yo creo que lo único que no hay en nuestra familia de todo lo que dicen es nacionalistas y tampoco estoy muy segura de eso”
Todo fluye, y las horas para el encuentro pasan y el momento se acerca.
Mamá moribunda se prepara psicológicamente, “Ellos” también deberían, no saben que ella siempre quiso ser militar y que además es fan de Xena.

Programas gratis

El proceso de creación de software puede llegar a ser mucho complejo, dependiendo de su porte, características y criticidad del mismo. Por ejemplo la creación de un norma activo es una faena que requiere proyecto, gestión, numerosos recursos y todo un equipo disciplinado de trabajo. En el tercero extremo, si se alcahuetería de un sencillo programa (por ejemplo, la resolución de una ecuación de ayudante orden), éste puede ser ejecutado por un solo programador (incluso admirador) sencillamente. Es así que normalmente se dividen en terna categorías depende su capacidad (líneas de recopilación) o hachís: de«pequeño», «mediano» y «gran porte». Existen varias metodologías para estimarlo, una de las más populares es el costumbre Cocomo que provee métodos y un software (programa) que calcula y provee una aproximación de todos los costos de fabricación en un «proyecto software» (relación horas/hombre, gasto monetario, cantidad de líneas fuente de convenio a habla desgastado, etc.).

Con una frase lo diré todo; se definen como “católicos apostólicos romanos”, y practicantes por supuesto.
http://www.somosfreeware.es/
Yo una vez estuve con “Ellos”, además en su casa, su propio terreno en el que por compromiso o simple educación no podía arrojarles ningún objeto contundente para después saltar por la ventana.
La casa es de lo mejor. Tienen una mesa con sobre de cristal y dos grandes candelabros imitación rococó dorados que salvaguardan en el centro un reloj, de igual estilo.
Viendo esto y con mis retinas sensiblemente afectadas mi encuentro que no llegó a más de 20 minutos no pintaba nada bien. Me senté en esos típicos asientos de cuero que, debido a la tacañería de esta familia (lo tienen todo) se encuentran rajados y que te hunden y absorben notando la dureza de la madera que lo conforman “De aquí no escaparás” parecen decir.
En minutos se tocaron temas tan poco adecuados como bodas, vivienda, dinero y política mientras mi cerebro abandonó mi cuerpo para que él sufriera de manera solitaria, a fin de cuentas el dolor físico suele ser más soportable.